Ultimamente estuve pensando en la manera de reaccionar de las tias cuando se habla de sexo. Pongamos por ejemplo una conversacion entre un grupo de amigos (tios y tias) en la que en un momento determinado los tios empiezan a hablar de sexo. Normalmente siempre te encuentras a la tipica tia que en el momento que oye la palabras “tetas”, “culo” o “coño” ya te suelta la tipica frase de “Sois unos salidos, estais pensando en lo mismo todo el dia” o que si oye la palabra “polla” se queda con un careto como de “yo no se que es eso yo no vi ninguna en mi vida”. En ese momento la frase que suena al unisono en todas las cabezas de los tios del grupo es “ya, y ahora me vas a decir que tu no te tocas por las noches, que nunca te hiciste un dedo, que nunca le viste la polla al tio con el que llevas saliendo ya 2 años y que no viste una peli porno en toda tu vida”, y basicamente eso es lo que termina por decir la tia en cuestion. Sin embargo, y como es sabido, esas afirmaciones son pura mentira, ya que las tias entre ellas si que hablan de sexo, y a veces pueden llegar a ser mas bestias hablando de sexo que un tio. Ademas es que esas afirmaciones no se sostienen por ningun lado. Hay una cosa que se llama curiosidad que todo ser humano posee y que incita a descubrir cosas nuevas.
Es cierto que los tios descubrimos el sexo mucho antes que las tias ya que tenemos una cosa colgando entre las piernas que tiene muchos nombres distintos y que aparte de servir para pintar las paredes a chorros para follar, tambien sirve para mear, hecho que nos obliga a verla muy a menudo y a agarrarla con igual frecuencia con el objetivo de poder apuntar bien para no hacer un destrozo cada vez que vamos a cambiarle el agua al canario. Este toqueteo continuo hace que cierto dia descubramos por accidente una caricia magica que aplicada reiteradamente sobre nuestro miembro viril nos otorga unos momentos de placer que terminan con una lefada impresionante en la pared con un descenso en caida libre hacia el retrete de nuestro ejercito de soldaditos preferidos. Si, señores ese es el momento de la primera paja, y a partir de eso el resto ya viene solo y con bastante rapidez.
Las tias sin embargo no estan en el mismo caso, no se tienen que tocar tanto por ahi abajo y no descubren tan pronto las maravillas de este quehacer tan entretenido y divertido. Pero llega un momento en el que la tia en cuestion oye por primera vez la palabra “porno” y le pica la curiosidad por saber k es eso. En ese momento es cuando ve por primera vez una peli porno y forzosamente le tiene que picar la curiosidad de saber que se siente y entonces es cuando decide meterse un pepino en el coño tocarse por ahi abajo a ver que se siente, y cuando lo prueba pues le gusta y lo repite con cierta frecuencia. Por las razones que acabo de explicar la frase de “yo no me hice un dedo en mi vida” es una afirmacion rotundamente falsa
Ahora el tema es, si sabemos que las tias hablan de sexo entre ellas y que todas han experimentado el placer sexual, ¿por que mienten como unas desgraciadas cuando hablan de sexo con los tios? La respuesta a esta pregunta en el proximo capitulo esta en el trato que le da la sociedad a la sexualidad femenina. Desde el principio de los tiempos se ha tratado a las mujeres como seres inferiores al hombre, y habia conductas que no estaban bien vistas, como por ejemplo que una mujer expresase libremente su sexualidad, y de ahi sale la mitica frase de “el hombre que folla mucho es un machote y la mujer que folla mucho una puta”. Para mi ni el uno es un machote ni la otra una puta, cada uno que folle cuanto quiera (y si folla mucho que lo disfrute), pero para el resto de la sociedad sigue siendo como dice la frase, por eso es por lo que las tias mienten al hablar sobre sexo, porque temen que si dicen que se hacen dedos o que se la chupan a sus novios todas las noches el resto de la gente las catalogue como unas “guarras”.
Tengo amigas que hablan de sexo libremente. Puedes hablar de sexo con ellas como si fuesen cualquiera de tus amigos. Puedes hablar de tetas, culos, pollas y coños y no se van a escandalizar. Puedes incluso ver pelis porno con ellas y comentarlas, reirte de lo chungos que son los dialogos, de lo ridicula que es la polla torcida hacia la derecha del actor de turno o de lo amorfas que son las tetas tamaño XXXXL de la actriz de turno. Por supuesto que mucha gente que las oye hablar de sexo tan abiertamente las cataloga como unas “zorrillas”, pero a ellas les da igual, saben de sobra que quien sea de verdad amigo suyo no va a pensar eso de ellas. La clave para acabar con la frasecita de “el hombre que folla mucho es un machote y la mujer que folla mucho una puta” es que todas las tias dejen de mentir, se expresen libremente sobre sexo, y que les resbale lo que diga el resto de la gente. De esa menera se consigue que sea algo cotidiano el que una mujer se exprese asi y que al final sea un comportamiento igual de aceptado en las mujeres y en los hombres.
Pero no solo las tias tienen que poner se su parte, tambien el resto de la sociedad tiene que abandonar esa postura machista medieval, abrir mas su mente y dejar de calificar a una tia de puta a la minima (en este aspecto las tias son mucho mas cabronas que los tios, son las primeras en llamarle puta a una tia, a la minima que se cabrean ya se joden vivas), solo de esa manera se puede llegar a una sociedad en la que cada dia el hombre y la mujer tengan menos diferencias y se entiendan todos mejor.
Y ahora, una pajilla (o un dedito) y pa cama